Artritis Psoriásica
La artritis psoriásica (APs) es una enfermedad inflamatoria crónica que causa inflamación, hinchazón y dolor en las articulaciones, así como también hinchazón de dedos de manos y pies, uñas (a menudo se despegan del lecho ungueal), dolor y enrojecimiento de los ojos y dolor en la parte posterior del talón.
La artritis psoriásica suele afectar a personas que ya padecen psoriasis, una condición marcada por lesiones cutáneas con escamas blanquecinas o rojizas. Y aunque a los pacientes generalmente se les diagnostica psoriasis primero, pueden aparecer problemas en las articulaciones antes de que aparezcan los síntomas cutáneos.
Se desconoce la causa de la artritis psoriásica, aunque existen los factores de riesgo genéticos y ambientales, así como el propio sistema inmunológico del cuerpo que parecen tener una relación con el desarrollo de la enfermedad.
El impacto de la artritis psoriásica depende de la gravedad de los síntomas y las articulaciones que se vean envueltas. La fatiga y la anemia son síntomas frecuentes, y algunos pacientes también experimentan cambios de humor. Tratar la artritis y reducir los niveles de inflamación, normalmente ayuda a mejorar estas situaciones.
La progresión de la APs varía de una persona a otra, pero para la mayoría de las personas puede empeorar con el tiempo si no se maneja adecuadamente. Por desgracia, una vez que se ha producido un daño articular, no se puede revertir.
Para tener más información puedes visitar UCBCares Enfermedades Reumáticas.
Vivir con artritis psoriásica
La artritis psoriásica puede ser una enfermedad incapacitante ya que puede provocar que sea difícil realizar actividades de la vida diaria como bañarse, vestirse, hacer tareas domésticas, subir y bajar de un automóvil, etcétera.
El impacto y el grado de dificultad varían de una persona a otra, aunque con el tratamiento adecuado y actividad física regular se puede controlar el grado y la gravedad de los síntomas causados por la APs.
Estos síntomas pueden aparecer de forma repentina y luego entrar en remisión durante períodos prolongados o pueden permanecer activos durante muchos años a la vez. Si no se trata, la artritis psoriásica puede provocar inflamación persistente, daño articular progresivo, dolor, discapacidad y restricciones –cada vez más grandes– en la realización de las actividades cotidianas.
UCB cuenta con un servicio especializado para dar apoyo tanto a pacientes como a profesionales sanitarios durante su tratamiento, en aquellas enfermedades en las que la compañía está trabajando. Para tener más información sobre artritis psoriásica puedes visitar UCBCares Enfermedades Reumáticas.
Aquí puedes conocer testimonios de personas afectadas por artritis psoriásica.
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